Cáncer y Tabaco Ambiental (ETS)
A Ernesto Pollitt

Durante los últimos años , la cruzada contra el tabaco de la "free America" reclutó nuevas fuerzas para disminuir y degradar al fumador, al afirmar que los daños se esparcían por los espacios de trabajo y los hogares, afectando por igual a colegas, inocentes ancianas y ancianos, niños y niñas, pero especialmente a las esposas con sus apestosos humos "cancerígenos". ETS fue la sigla de la nueva preocupación ambiental (Environmental Tobacco Smoke). Poco a poco los cuentos de horror sobre las vidas perdidas por el tabaquismo ("pandemia" en el decir de muchos) llenaron los medios de comunicación , ilustrados con tremebundos casos, y como resultado se retiraron muchos ceniceros de los dormitorios , hospitales y clínicas, así como se prohibió que los viajeros fumaran en los aeropuertos y durante vuelos cortos, privando a los usuarios de su forma saludable de combatir el estrés del viaje, o de disfrutarlo mejor.
En 1988 , en efecto, la Agencia Internacional de Investigación en Cáncer(IARC), vinculada a la Organización Mundial de la Salud, por ejemplo, decretó que el humo del tabaco era "cancerígeno" y que el presumido daño a terceros constituía una inferencia apropiada , aunque no se contaba, por entonces , con ninguna investigación definitiva. Recordemos que, ese mismo año, el General Surgeon , en los Estados Unidos, señaló al tabaco como sustancia "adictiva", fallo ratificado por el Comité de Expertos en Farmacodependencia de la OMS, en su 28º Informe de 1993, así como respaldado por la psiquiatría en su conjunto, apoyando, como siempre, al sistema.
La feroz campaña preventiva llevada adelante, con el apoyo de las agencias estatales encargadas del terror, en nuestro medio y en el mundo, sostuvo poco menos que el humo del tabaco envilecía el aire, convirtiéndole en malsano, y sobre tal base se iniciaron muchos juicios, en los Estados Unidos, por los daños a la salud debidos, presuntamente, al tabaco ambiental. A raíz de cargo, que se juzgo útil para la campaña prohibicionista, fue que se cerraron progresivamente los espacios a los pertinaces fumadores que no se asustaban por afectar los propios pulmones , pero respetaban los ajenos. No podían pretender la defensa de su derecho consuetudinario a echar humos si afectaba tan seriamente , como se decía, la salud de los demás. Ventajas le veían, pese al riesgo, especialmente a las volutas de sus tabacos preferidos, pero prefirieron ceder graciosamente ante el "bien común". Para que no nos quedáramos atrás, mientras todo sucedía fuera sin aporte nacional alguno al debate, pero sí a la propaganda, siempre deseosos de modernizar al país, los políticos aceptaron la cruzada importada que se afirmaba fundada y dictaron la bendita 25357 que prohibe fumar en" lugares públicos" y afirma sin ambages que "fumar es dañino para la salud".
El domingo 8 de marzo próximo pasado, dos diarios londinenses, Sunday Telegraph y Sunday Time, dieron breve cuenta del resultado final de una investigación diseñada en 1988 y ejecutado por la misma Agencia Internacional mencionada, sobre humo de tabaco ambiental y su relación con el cáncer pulmonar en Europa. En el que- según comentario expresado- sería el único estudio en gran escala realizado hasta hoy, comparando 650 casos de cáncer con 1,542 personas sanas , en doce centros de siete países de Europa, sólo se habría registrado- según información recogida en Ginebra- un ligero incremento del riesgo ( 16 % en el hogar; 17% en el trabajo), pero que el amplio margen de error (0.93 a 1.44) , admitido por los propios investigadores, lo convertía en irrelevante, no significativo en términos estadísticos. Como comentó posteriormente Lorraine Mooney , en The Wall Street Journal (13-3): "Esto corresponde a lo que cualquiera con sentido común habría esperado. Después de todo, la dosis es el veneno y un paquete de cigarrillos expone al fumador a bastante más humo que a su mujer o compañero de trabajo".
Pese al deleznable fundamento positivo señalado, IARC insistió de inmediato , en un comunicado publicado en Internet (11-3), que el resultado concordaba con estudios previos, en Europa y los Estados Unidos, alertando sobre el incremento del riesgo de cáncer pulmonar debido al tabaco ambiental. No se mencionaba para nada el margen de error y, por el contrario, se acusaba a los diarios británicos de haber afirmado falsedades
Recién el mes pasado apareció el informe final de la investigación en el Journal of the National Cancer Institute (vol.90, No. 19) en el cual no se habría podido esconder el hecho de haberse encontrado una relación positiva, pero estadísticamente no significativa entre humo de tabaco y cáncer pulmonar. En todo caso las consecuencias de tal exculpación no se han hecho esperar: por lo pronto se ha reforzado la defensa de los espacios para fumadores, superado el terrorismo cancerofóbico que para muchos convirtió en "facts", en hechos, los que sólo habrían sido esperados resultados del "daño", siguiendo , aparentemente, la sesgada "metodología" empleada en toda estrategia político-científica , como fue el caso de la coca ( La menciono tan sólo para corresponder en algo al diagnóstico psiquiátrico de "monotemático" ).
Esperamos que el reciente informe y la evaluación crítica del mismo lleguen pronto a Lima , posibilitando una información más completa. Ojalá , mientras tanto, las compañías de aviación prohibicionistas reconsideren la medida, al atenuarse hasta niveles no significativos nuestra culpa. Al poderse cuestionar ,con fundamento positivo, el mayor temor del ETS , como es el riesgo del cáncer pulmonar , queda justificada , de otro lado, la tolerancia siempre mantenida por otras líneas. Personalmente, pues no niego ser un fumador, lamento que entre éstas no esté la línea de la tolerante Holanda , cuando , antes bien, confiaba que admitiría con el tiempo "otros humos" que se disfrutan ampliamente en Amsterdam, asumiendo el aumento del riesgo que esos "otros humos" conllevan. Lo cual me parece muy racional , conociendo y apreciando sus virtudes psicoactivas , así como los riesgo que, de por sí, nos acarrea la vida..

 

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