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BIOLOGÍA DE LOS ARTRÓPODOS
Base para el manejo de plagas

(2017, Diciembre 19).- La decana de la Facultad de Agronomía, Mg.Sc. Liliana Aragón, informó que gracias al convenio que la UNALM sostiene con INTEROC desde el 20 de mayo de 2016, este año se desarrolló una convocatoria de tesis, en la que dos alumnas molineras obtuvieron el financiamiento para desarrollar sus proyectos de investigación.

La ponencia estuvo a cargo del Mg.Sc. Edison Torrado, profesor de Entomología de la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Colombia, fundador y director general del Instituto ENTOMA. El expositor informó que los artrópodos se clasifican en: arácnidos, miriápodos, crustáceos e insectos y que, debido a sus 479 millones de años de evolución, han logrado adaptarse a diferentes entornos.

Por otro lado Torrado resaltó que: “Existen tres factores para decir que un artrópodo es exitoso: alimentación, reproducción y supervivencia. Dentro de la alimentación está la búsqueda, que puede ser visual u olfativa; la selección, donde el artrópodo decide, mediante quimiorreceptores gustativos, si el alimento es viable para su alimentación o no; la ingestión y digestión”.

Asimismo, el ponente aseguró que a la hora de la ingesta, los artrópodos se clasifican en masticadores y succionadores, teniendo como principal diferencia que estos últimos solo se alimentan de líquidos, mientras que los primeros también consumen sólidos.

Dentro de la ecología de la herbivoría (forma de depredación en la que el organismo presa es una planta) las defensas vegetales se clasifican como constitutivas o inducibles. “Las espinas son un tipo de defensa mecánica o constitutiva, porque están presentes independientemente de que haya o no un ataque; y las defensas químicas o inducibles son los metabolitos secundarios liberados por la planta ante la presencia de un artrópodo o patógeno y actúan sobre el sistema nervioso de los insectos”, informó el especialista.

 

TRANSMISORES DE VIRUS
Torrado señaló que existe un proceso de coevolución, ya que la planta se defiende ante los artrópodos y estos buscan contrarrestar dicha defensa. “Los succionadores deben neutralizar los metabolitos secundarios antes de ingerir, por ello liberan saliva antes de alimentarse. El masticador tiene periodos de reposo que le permite neutralizar de manera interna las defensas químicas de la planta”, informó.
También mencionó que los virus transmitidos por artrópodos están más asociados a succionadores que a masticadores y se clasifican en circulativos y no circulativos. En el caso de los virus circulativos, se subdividen en propagativos y no propagativos. En el primer caso el virus ingresa, se replica dentro del portador y se transmite por la saliva a otros hospedantes.

EVOLUCIÓN MORFOLÓGICA
Como resultado de la interacción constante entre depredadores y presas a lo largo del tiempo evolutivo, algunos artrópodos tienen una determinada forma o color que les permite evadir a algunos depredadores. “Para sobrevivir los artrópodos saltan, vuelan, se camuflan, se ocultan, se cubren con su propio excremento, fingen su  muerte, poseen una coloración aposemática, se basan en el mimetismo mulleriano o en el mimetismo batesiano”, destacó el Mg.Sc. Edison Torrado.

CONTROL QUÍMICO, CULTURAL, ETOLÓGICO Y BIOLÓGICO
El ponente señaló que los plaguicidas pueden ser utilizados con coadyudantes para romper la tensión superficial de las plantas y mejorar su efectividad. Asimismo, como parte del control cultural, se retira la maleza, se utiliza mallas anti-pulgón, sopladora y agua a presión; se realiza la desinfección de aperos y erradicación de la planta enferma.

“La aplicación de extractos caseros, como el de ajo y ají con aceites esenciales, también son útiles para el manejo de plagas. Por otro lado, en el control etológico podemos aprovechar las reacciones de comportamiento de los insectos, haciendo trampas que mezclen color y olor para atraerlos”, informó Torrado.

Finalmente, el especialista mencionó que, para realizar de manera exitosa el control biológico, es importante conocer la biología, ecología y comportamiento tanto del agente causante del daño como de sus enemigos naturales. Dentro de las ventajas de utilizar el control biológico está el poco o ningún efecto nocivo colateral de los enemigos naturales hacia otros organismos, la alta vulnerabilidad de las plagas, el largo periodo de control y la inexistencia de problemas de intoxicaciones.

 

José Rodríguez Chávez


 


 

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